Xavier Dolan, el genio egocentrico creador de «Mommy»

Quizá rayando un poco en el egocentrismo, Xavier Dolan se destaca por ser uno de los directores, productores, actores y guionistas más jóvenes que ha ganado un sin número de premios a su corta edad y que ya cuenta con cinco largometrajes en su carrera cinematográfica.

Dolan destaca en sus cintas, historias donde se mezclan emociones con temas angustiantes y hasta bizarros, pero de extrema ternura seductora. Viviendo la decadencia de los personajes y retratando lo que es posible en una sociedad confusa. Jóvenes incomprendidos en busca de libertad e identidad, homosexualidad, enfermedades mentales, gente diferente. Los personajes desenmascaran su soledades con sentimientos desgarradores.

Xavier Dolan no sólo encuentra buenas historias entrometiéndose en vidas complejas y estridentes, lo logra con su extraordinaria dirección, e incluso con sus interpretaciones frente a la cámara o el micrófono. Su manera de hacer cine se distingue en la creatividad sin formalismos, experimentando en formatos, lenguaje y encuadres bien logrados, esto lo acerca a la genialidad en la industria cinematográfica. Aunque no todos lo admiran Xavier Dolan por partes iguales es amado y odiado.

Su cinta más reciente, y posiblemente la mejor, es “Mommy” premiada en Cannes y nominada al Óscar como mejor película extranjera; Dolan prefiere quedarse detrás de cámaras (bien podría haber hecho el papel protagónico que hace Antoine-Oliver Pilon) y vuelve a desbordarse con esta historia sobre la relación madre e hijo, desgarrándose entre la tarea de ser madre y la agonía de una decisión que rompe con los estereotipos sociales, descubre desde lo más profundo el bloqueo de los sentimientos para estallar en risas y llantos.

El formato 1.1 le da un toque único a la cinta, y funciona extraordinariamente para jugar con la intención de opresión en las diferentes situaciones. La música suaviza esos momentos de intensidad, encendiéndolos con explosiones de felicidad mientras los diálogos nos sumergen en reflexiones intensas.

Después de Dolan seguro existirá otra forma de hacer cine para las siguientes generaciones, enseñando a muchos jóvenes que la creatividad no tiene límite a la hora de contar historias.